Las claves para comprender los reveladores hallazgos del último reporte del Panel Intergubernamental para el Cambio Climático (IPCC)

Septiembre 7th, 2021

*Basado en el reportaje “This is the most sobering report card yet on climate change and Earth’s future. Here’s what you need to know”, escrito para CSIRO por: Pep Canadell, Joelle Gergis, Malte Meinshausen, Mark Hemer, Michael Grose. Traducido y editado para CSIRO Chile por Alejandra Cuevas y Francisco Bravo.

 

El Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático ha publicado su tan esperado reporte sobre el cambio climático. Sus autores ya han expuesto los nuevos hallazgos.

 

La reciente publicación del primer reporte de la sexta Evaluación del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) ha provocado alerta en todo el mundo. Y algo que a muchos no sorprende pero preocupa, es que algunos de los cambios son prácticamente irreversibles.

Dentro de sus principales hallazgos es que ahora es indiscutible que las actividades humanas están provocando el cambio climático, haciendo que los eventos climáticos extremos, como olas de calor, lluvias torrenciales o sequías, sean más frecuentes y severos.

 

¿Por qué es tan relevante este reporte?

El reporte entrega la comprensión física más actualizada del sistema y el cambio climático, que reúne los últimos avances en la ciencia del clima.

 

Combina múltiples líneas de evidencia del paleoclima, observaciones, comprensión de procesos y simulaciones climáticas globales y regionales.

La Tierra se ha calentado 1.09°C desde la época preindustrial y muchos cambios, como el aumento del nivel del mar y el derretimiento de los glaciares, son ahora prácticamente irreversibles, según el reporte más revelador del IPCC hasta ahora.

Este documento también dejó ver que escapar del cambio climático causado por la acción humana, ya no es posible. El cambio climático está ahora afectando a todos los continentes, regiones y océanos de la Tierra y a todas las facetas del clima.

El tan esperado reporte corresponde a la sexta evaluación de este tipo que se realiza desde que se formó el panel en 1988 y proveerá a los líderes mundiales de información oportuna y precisa acerca del cambio climático, como antesala de la cumbre internacional en Glasgow, Escocia, programada para el próximo noviembre.

El IPCC es el principal organismo científico del clima de las Naciones Unidas y la Organización Meteorológica Mundial. Es la autoridad mundial sobre el estado del clima de la Tierra y de cómo las actividades humanas lo afectan. Lo conforma un equipo de científicos quienes, basados en el trabajo de miles de colegas en todo el mundo, se encargaron de producir esta nueva evaluación.

Desde CSIRO, 5 científicos forman parte del equipo, quienes en conjunto contribuyen para la elaboración de información relacionada con las tasas, causas y posibles trayectorias futuras del calentamiento global y otros cambios en el sistema climático; basados en la ciencia del clima.

El documento resumen organiza los hallazgos globales en 14 declaraciones de alto nivel para 4 áreas temáticas.

  • El estado actual del clima,
  • los posibles futuros climáticos,
  • la información climática para evaluación de riesgos y adaptación regional
  • y limitar el cambio climático.

Lamentablemente, casi no hay buenas noticias en las 3.900 páginas de texto publicadas hoy. Pero todavía hay tiempo para evitar los peores daños, si como humanidad, nos lo proponemos.

Crédito de la imagen: John McConnico / AP

¿Qué es lo realmente nuevo?

Por primera vez el IPCC afirma sin dejar lugar a dudas, que los humanos somos responsables del calentamiento observado en la atmósfera, las tierras y los océanos.

 

Un 1.07°C del 1.09°C de calentamiento se debe a los gases de efecto invernadero asociados a las actividades humanas. En otras palabras, casi todo el calentamiento global se debe a la acción humana.

 

La influencia humana también se ha detectado por primera vez en eventos extremos compuestos. Por ejemplo, ahora son más frecuentes las incidencias de olas de calor, sequías e incendios al mismo tiempo. Estos eventos compuestos se han observado en Australia, el sur de Europa, el norte de Eurasia, partes de las Américas y los bosques tropicales africanos.

Se han hecho posible por primera vez estimaciones de cambios irreversibles; de resultados de alto riesgo y baja probabilidad, como el colapso de la capa de hielo, y cambios bruscos de la circulación oceánica.

 

También se puede destacar las brechas de información en observación del clima (clima actual) donde destaca Chile y en particular la Patagonia (Chile-Argentina).

 

 

¿Cuál es la proyección del cambio climático en nuestra región de centro y Sudamérica?

Para la denominada Southwestern South America (SWS), región así definida por el reporte y que prácticamente abarca toda la extensión de Chile, se ha proyectado un aumento de sequías tanto en frecuencia como en severidad, y también en su área de cobertura. El así llamado “clima de fuego” aumentaría, refiriéndose al clima que favorece la dispersión de humo e incendios. Para la evaluación de estas proyecciones se consideraron datos como la humedad relativa, la velocidad y dirección del viento, junto a la altura, humedad del terreno entre otros.

Esta proyección afectará potencialmente a una amplia gama de sectores, incluidos la agricultura, la silvicultura, la salud, los ecosistemas y otros, que serán evaluados en el Reporte de Grupo de Trabajo II del IPCC.

Es probable que la pérdida de volumen de los glaciares y el deshielo de permafrost continúen en la cordillera de los Andes según todos los escenarios planteados en el reporte, lo que causaría importantes reducciones en el caudal de los ríos y provocaría además potenciales desbordes de lagunas glaciares producto del deshielo.

En un escenario de aumento global de las temperaturas de 2 ó más grados Celsius, se proyecta para la zona sur austral de Chile y Argentina un aumento de precipitaciones extremas tanto en intensidad como en frecuencia junto con un aumento del riesgo de inundaciones.

Acorde con el mismo escenario, se proyecta que en esta región aumente la sequía agrícola y ecológica para mediados del  siglo XXI.

Con respecto de toda la zona centro sur de América, el reporte revela que es muy probable que las temperaturas medias aumenten en todas las subregiones y sigan aumentando a tasas superiores a la media mundial (alta confianza).

En términos genéricos para toda la región centro y suramericana, se prevé que las precipitaciones medias de toda la región cambien, con aumentos en América del Sur noroccidental y América del Sur sudoriental (SES) y serían medianamente probables las disminuciones de precipitaciones medias en América del Sur nororiente y América del Sur sudoccidental.

En comparación con el nivel medio mundial del mar, en los últimos tres decenios el nivel relativo del mar ha aumentado a un ritmo superior al nivel medio mundial en el Atlántico Sur y el Atlántico Norte subtropical, y a un ritmo inferior en el Pacífico oriental. Y es muy probable que el aumento relativo del nivel del mar continúe en los océanos alrededor de América Central y del Sur, lo que contribuiría de forma altamente probable con el aumento de las inundaciones costeras en las zonas bajas y al retroceso de la costa a lo largo de la mayoría de las costas arenosas en menor medida.

También se prevé que las olas de calor marinas aumenten en toda la región durante el siglo XXI.

Los impactos del cambio climático sobre los territorios y sistemas socio-ecológicos asociados son múltiples y notoriamente difíciles de predecir. Esta brecha limita la capacidad de los gobiernos y sus comunidades de enfrentar las amenazas y aprovechar las oportunidades asociadas a este fenómeno.

En Chile, CSIRO en conjunto con entidades colaboradoras, está abordando este desafío mediante el desarrollo, validación y transferencia de herramientas de modelación y evaluación de escenarios futuros. Un ejemplo de ello puede revisarse en el siguiente enlace.

¿Qué acciones está tomando Chile?

El Reporte del IPCC es el primero que se hace público de los cuatro que componen esta sexta evaluación. Durante 2022 se entregarán los otros tres documentos que completan la evaluación. Juntos, serán clave para el ejercicio del Ajuste y Actualización Mundial del Acuerdo de París (Global Stocktake o GST), mediante el cual los estados parte del acuerdo comprometen ajustes más exigentes a las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDCs o National Determined Contributions) para lograr las metas acordadas.

Chile realizó su último NDC en abril de 2020, donde comprometimos como país alcanzar la carbono- neutralidad en 2050. Los compromisos chilenos con el Acuerdo de Paris incluyen en cuanto a mitigación emitir 95 Mt CO2-eq a partir del año 2030, con un máximo de emisiones (año peak) al 2025, y lograr un balance anual de emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) que no supere las 1.100 Mt CO2-eq para el periodo 2020-2030.

Es inequívoco: los humanos están calentando el planeta

Como ya decíamos, por primera vez el IPCC afirma sin dejar lugar a dudas, que los humanos somos responsables del calentamiento observado en la atmósfera, las tierras y los océanos.

El IPCC da cuenta de que la temperatura de la superficie global de la Tierra se calentó 1.09°C entre 1850-1900 y la última década. Esto es 0,29°C más cálido que en el reporte anterior del IPCC de 2013. (Cabe señalar que 0,1°C del aumento se debe a ajustes en los datos).

El IPCC reconoce el papel de los cambios naturales en el clima de la Tierra. Sin embargo, revela que 1.07°C de 1.09°C de calentamiento se debe a los gases de efecto invernadero asociados a las actividades humanas. En otras palabras, casi todo el calentamiento global se debe a la acción humana.

La temperatura de la superficie global se ha calentado más rápido en los últimos 50 años (desde 1970 al presente) que en cualquier otro período equivalente en los últimos 2.000 años. Por otra parte el calentamiento también alcanzó profundidades oceánicas por debajo de los 2.000 metros.

El IPCC muestra que las actividades humanas también han afectado a las precipitaciones globales (lluvia y nieve). Desde 1950, la precipitación global total ha aumentado, y mientras algunas regiones se han vuelto más húmedas, otras se han vuelto más secas.

Además, la frecuencia e intensidad de los eventos de precipitación extrema se han incrementado en la mayoría de las áreas terrestres. Esto se debe a que la atmósfera más cálida puede retener más humedad, aproximadamente un 7% más por cada grado adicional de temperatura, lo que provoca estaciones más húmedas y eventos de lluvia mas intensos.

 

 

Altas concentraciones de CO₂, creciendo más rápido

El reporte revela que, las concentraciones globales actuales de dióxido de carbono atmosférico (CO₂), y las tasas de incremento asociadas aumentaron más que en cualquier otro momento de los últimos dos millones de años.

La velocidad a la que ha aumentado el CO₂ atmosférico desde la revolución industrial (1750) es al menos diez veces más rápida que en cualquier otro momento durante los últimos 800.000 años y entre cuatro y cinco veces más rápida que en cualquier otro momento de los últimos 56 millones de años.

Aproximadamente el 85% de las emisiones de CO₂ provienen de la quema de combustibles fósiles. El 15% restante se genera a partir del cambio de uso de la tierra, como la deforestación y la degradación.

Las concentraciones de otros gases de efecto invernadero tampoco están mejorando. El segundo y tercer puesto entre los gases que más contribuyen al calentamiento global después del CO₂, son el metano y el óxido nitroso, cuya tasa de emisiones también ha aumentado. De las actividades humanas, las emisiones de metano identificadas provienen principalmente de la ganadería y la industria de los combustibles fósiles; en tanto las emisiones de óxido nitroso provienen principalmente del uso de fertilizantes nitrogenados en los cultivos.

 

Crédito de la imagen: Shutterstock

 

 

Clima extremo en aumento

Los extremos calurosos, las olas de calor y las fuertes lluvias también se han vuelto más frecuentes e intensas en la mayoría de las regiones en la Tierra desde 1950, confirma el IPCC.

La influencia humana también se ha detectado por primera vez en eventos extremos compuestos. Por ejemplo, ahora son más frecuentes las incidencias de olas de calor, sequías e incendios al mismo tiempo. Estos eventos compuestos se han observado en Australia, el sur de Europa, el norte de Eurasia, partes de las Américas y los bosques tropicales africanos.

Crédito de la imagen: AP Photo / Michael Pappas

 

Océanos: más calientes, más altos y más ácidos

Los océanos son los encargados de absorber el 91% de la energía asociada al aumento de los gases de efecto invernadero. Esto ha provocado un calentamiento de los océanos y un aumento de olas de calor marinas, especialmente durante los últimos 15 años.

Las olas de calor marinas causan la muerte masiva de la vida marina, particularmente organismos sésiles, como ocurre con los eventos de blanqueamiento de los corales. Incluso si el mundo restringe el calentamiento a 1.5-2°C, lo que sería consistente con el Acuerdo de París, las olas de calor marinas serán cuatro veces más frecuentes para fines de siglo.

El derretimiento de las capas de hielo y los glaciares, junto con la expansión del océano a medida que se calienta, ha provocado un aumento medio global del nivel del mar de 0,2 metros entre 1901 y 2018. Pero, lo que es más importante, la tasa de aumento del nivel del mar se está acelerando: 1,3 milímetros por año durante 1901-1971, 1,9 mm por año durante 1971-2006 y 3,7 mm por año durante 2006-2018.

La acidificación de los océanos, causada por la absorción de CO₂, se ha producido en todos los océanos y está alcanzando profundidades superiores a los 2.000 m en el Océano Austral y el Atlántico Norte.

 

Créditos de imagen: Shutterstock

 

 

Muchos cambios ya son irreversibles

El IPCC dice que si el clima de la Tierra se estabilizara pronto, algunos daños inducidos por el cambio climático no podrían revertirse en siglos, o incluso milenios. Por ejemplo, un calentamiento global de 2°C en este siglo conducirá a un aumento medio del nivel del mar global de entre dos y seis metros en 2000 años, y mucho más para escenarios de emisiones más altas.

A nivel mundial, los glaciares se han estado retirando sincrónicamente desde 1950 y se prevé que continúen derritiéndose durante décadas después de que se estabilice la temperatura global. Mientras tanto, la acidificación de las profundidades del océano se mantendrá durante miles de años después de que cesen las emisiones de CO₂.

Con respecto del permafrost (suelos congelados) en Alaska, Canadá y Rusia y la perspectiva de que traspase un punto de inflexión ha sido ampliamente discutida. La preocupación es que a medida que se va derritiendo el suelo congelado, se podrían liberar grandes cantidades de carbono que se han acumulado durante miles de años debido a plantas y animales muertos que se han descompuesto anteriormente.

El reporte no identifica ningún cambio abrupto de importancia mundial en estas regiones durante este siglo, según la evidencia actualmente disponible. Sin embargo, proyecta que las áreas de permafrost liberarán alrededor de 66 mil millones de toneladas de CO₂ por cada grado adicional de calentamiento. Estas emisiones son irreversibles durante este siglo frente a todos los escenarios de calentamiento.

 

 

Cómo podemos estabilizar el clima

La temperatura de la superficie de la Tierra seguirá aumentando hasta al menos 2050 en todos los escenarios de emisiones considerados en el reporte. La evaluación muestra que la Tierra podría superar el límite de calentamiento de 1,5°C a principios de la década de 2030.

Si reducimos las emisiones lo suficiente, hay solo un 50% de probabilidad de que el aumento de la temperatura global se mantenga en torno a 1,5°C (incluido un sobrepaso temporal de hasta 0,1°C). Para que la Tierra vuelva a tener un calentamiento por debajo de 1,5°C, sería necesario eliminar el CO₂ de la atmósfera mediante tecnologías de emisiones negativas o soluciones basadas en la naturaleza.

Esto considera además que el calentamiento global se mantendría por debajo de 2°C durante este siglo solo en escenarios donde las emisiones de CO₂ alcancen un cero neto alrededor o después de 2050.

El IPCC analizó las proyecciones climáticas futuras de docenas de modelos climáticos, producidos por más de 50 centros de modelado en todo el mundo. Mostró que la temperatura superficial promedio global aumenta entre 1-1.8 ℃ y 3.3-5.7 ℃ este siglo por encima de los niveles preindustriales para los escenarios de emisiones más bajas y más altas, respectivamente. El aumento exacto que experimente el mundo dependerá de cuántos más gases de efecto invernadero se emitan.

El reporte afirma, con gran certeza, que para estabilizar el clima, las emisiones de CO₂ deben llegar a cero y otras emisiones de gases de efecto invernadero deben disminuir significativamente.

 

Crédito de la imagen: AAP / Suministrada por Granville Harbour Wind Farm

También sabemos que, para un objetivo de temperatura determinado, hay una cantidad finita de carbono que podemos emitir antes de alcanzar cero emisiones netas. Para tener una probabilidad de 50:50 de detener el calentamiento en alrededor de 1,5 ℃, esta cantidad es de aproximadamente 500 mil millones de toneladas de CO₂.

Con los niveles actuales de emisiones de CO₂, este “presupuesto de carbono” se agotaría en un plazo de 12 años. Agotar el presupuesto llevará más tiempo si las emisiones comienzan a disminuir.

Los últimos hallazgos del IPCC son alarmantes. Pero no existen impedimentos físicos o ambientales para mantener el calentamiento muy por debajo de 2 ℃ y limitarlo a alrededor de 1,5 ℃, los objetivos acordados a nivel mundial del Acuerdo de París. La humanidad, sin embargo, debe optar por actuar.

 

 

¿Dónde puedo acceder a Cambio climático 2021: la base de la ciencia física?

Se puede acceder al reporte completo, el documento Resumen para los responsables de políticas, las hojas informativas regionales y otros recursos en:

 

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